En un escenario marcado por la reciente devaluación del peso argentino, el avance de la cosecha de soja y maíz, y las crecientes tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, el sector agropecuario enfrenta desafíos y oportunidades que requieren un análisis profundo.
El agro argentino en la encrucijada: volatilidad cambiaria, cosecha en marcha y tensiones globales
Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, analiza el impacto de la reciente devaluación, la evolución de la cosecha y el contexto internacional en los mercados agrícolas
Iván Lubatti
Agro. En el caso del maíz, "el mercado está tirante y seguirá así hasta que llegue el grano de EEUU. "Podemos darnos el lujo de esperar algo más, pero sabiendo que, de largo, debería caer", indicó Romano.
Dante Romano, profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral, destacó que "tras el inicio de la fase 3 y con solo tres ruedas hábiles, el tipo de cambio abrió en la zona de los u$s1.200con una devaluación del 10%, pero cerró más cerca de los 1.150, recortando al 5%".
La eliminación del esquema blend generó expectativas de una baja en dólares del 5%, sin embargo, "la soja logra mantenerse y el maíz subir", señaló Romano. A pesar de ello, "el productor esperaba recibir más pesos por su soja, y esto no está pasando".
El experto explica que "el inicio de la trilla se demoró por lluvias, y ahora que el clima se muestra más seco, los productores dedicarán su capacidad de trabajo a la oleaginosa". Encontraste, "el maíz quedará en el campo, en momentos donde hay una cola de buques por cargar que supera las 2,5 millones de toneladas y con una demanda externa activa".
El impacto del mercado global
En cuanto al mercado internacional, Romano observa que "la guerra comercial se tranquilizó sustancialmente estas últimas dos semanas", con señales de acercamiento entre Estados Unidos y China. Sin embargo, adviertió que "debemos tener presente que cuando Chicago bajó, las primas mejoraron y localmente no sentimos el impacto". Por lo tanto, "tampoco sentiríamos ahora el impacto de un acuerdo".
Respecto a la siembra en Estados Unidos, Romano indicó que "la misma viene algo lenta, pero esto es por lluvias". No obstante, "la capacidad de trabajo de los farmers es importante, y los suelos estaban algo secos, no preocupa tanto esta cuestión".
En el mercado de trigo, las producciones en el Mar Negro, EEUU y Europa parecen encaminadas, y en Argentina se espera un leve incremento de área, sobre una superficie de por sí muy grande. "Podríamos superar las 20 millones de toneladas de trigo, cuando todavía queda mucho trigo viejo dando vueltas", comentó Romano.
Finalmente, Romano concluyó: "Es importante cubrir la soja si vamos a tener que vender algo durante la presión de cosecha, pero si esto está cubierto, esperaríamos a después del pico de cosecha, aun corriendo el riesgo de que al 30/6 suban los derechos de exportación".
En el caso del maíz, "el mercado está tirante y seguirá así hasta que llegue el grano de EEUU. Podemos darnos el lujo de esperar algo más, pero sabiendo que, de largo, debería caer".